El centro del corazón es el centro del EGO y de la vida mundana. Uno podría pensar que en el corazón residen las emociones, pero éste no es el sentido que tiene el centro. Se pone en marcha para tener (materialmente) lo que me hace falta. Es un motor que se pone en marcha para levantarnos del sofá e ir a comprar leche cuando tenemos la nevera vacía. Esto funcionará así si el centro del corazón está definido

Aquí reside la fuerza de voluntad y la autoestima.

Con un centro del corazón sin definir puede resultar muy complicado cumplir las promesas que se hacen.